El branding es la clave para conseguir una imagen de marca potente, coherente y fácil de recordar para el cliente. Su vinculación a una estrategia es imprescindible para servirse de una línea gráfica, identidad y cromatismos concretos, entre otras muchas cosas.
En este artículo me propongo analizar en profundidad el concepto de branding digital y cómo el diseño puede ser clave para potenciar tu imagen de marca. ¿Te vienes?.
Antes de lanzar un producto al mercado, es importante tener definida la identidad de la marca, el grupo objetivo al que se quiere llegar, la necesidad a satisfacer y el nombre comunicativo.
Como decíamos, el branding de una marca siempre está vinculado a una estrategia.
Esto se debe a que necesita servirse de su línea gráfica, identidad y
cromatismo, entre muchas otras cosas, para implementarla en las
distintas plataformas.
El gurú de gurúes, Tom Peters, autor del libro The brand called you (“Una marca llamada tú”, en inglés) dijo: “La marca personal enlaza tus pasiones, tus atributos clave y tus fortalezas, con una proposición de valor, dejando claro lo que te diferencia de los demás”.
Esta es una muy buena definición de lo que es el branding: un proceso de creación y desarrollo de una marca, a nivel visual, auditivo e interactivo (y, en este aspecto, el branding digital tiene mucho que decir).
O, en palabras de Tom Peters: “La marca personal enlaza tus
pasiones, tus atributos clave y tus fortalezas con una proposición de
valor, dejando claro lo que te diferencia de los demás”.
¿Cuáles son las claves del branding?
Podríamos categorizarlas en cuatro ámbitos principales, las llamadas 4 P
del branding. ¡Toma nota!
El branding está conformado por cinco elementos. ¡Te los detallo!
Un buen nombre sigue siendo una ventaja competitiva sobre todos aquellos que no comprenden el poder de un nombre. Sin duda, invertir en naming es invertir en crear valor de marca. Es importante que el nombre sea:
La identidad corporativa de una empresa no es otra cosa que su razón de ser: qué es, qué hace y cómo lo hace. Es la suma de características, valores y creencias con los que una empresa se identifica, y gracias a las cuales se diferencia del resto de las empresas, a lo largo del tiempo.
El posicionamiento de una marca es la relación, más o menos fuerte, que existe en la mente del consumidor entre la marca y unos atributos determinados. Podríamos decir que el branding es un proceso y que el posicionamiento es el resultado de un buen branding.
El concepto de lealtad está íntimamente relacionado con el de fidelización. Podemos decir que las diferentes acciones que una marca desarrolla para fidelizar a sus clientes tienen por objetivo retenerlos y hacerlos más leales.
El secreto para que tu público ame tu marca reside en agregar valor constantemente en cada una de las áreas clave de tu negocio. ¡Tenlo en mente!
Cuando hablamos de construcción de marca, hablamos de arquitectura de marca. Los beneficios de una buena construcción de tu marca son los siguientes:
La guía de estilo es ese documento (sagrado) que define todos los aspectos que implican relación con la imagen de marca. Una buena guía de estilo es clave para mantener la coherencia en todos los lugares donde aparece tu marca.
Los elementos visuales de la marca son las representaciones gráficas de una empresa. Estas se proyectan al público a través de un símbolo o un diseño tipográfico especial.
La combinación de los elementos visuales (nombre comunicativo, símbolo, alfabeto, colores y el sistema de señalización) da la apariencia global de la empresa y constituye una expresión física muy importante en los mercados en los que esta concurre.
Un claro ejemplo de unos correctos elementos visuales son los que promueve Coca-Cola: desde el propio nombre, su característico logotipo de aire retro, el rojo de sus letras, la curva que subraya el nombre y la propia forma de sus botellines son elementos visuales inconfundibles. ¿O no?.
El símbolo es la expresión de la identidad de una compañía, manifestada a través de un grafismo que la representa desde el punto de vista material. Por definición, el símbolo es un elemento material que está en lugar de otra cosa ausente, con la que no existe relación causal y a la cual representa por convención. El símbolo es el isologo.
Apple puede servir de ejemplo en este caso, ya que con tan solo ver la manzana ya sabemos de qué marca estamos hablando.
El logotipo es el nombre de la empresa. Este puede formarse por letras, abreviaturas, cifras, acrónimos, etc. Muchas compañías construyen su identidad visual con una tipografía especial, adicionándole el símbolo. El logotipo y el símbolo constituyen la identidad de la empresa y, entre los dos, conforman su personalidad física.
El logotipo de Braun es su propio nombre, sin ningún símbolo, pero, a su vez, su logotipo es el símbolo de la marca.
El color es el otro componente de la personalidad física de la empresa. El color cumple una función distintiva sobre la que se articula el logotipo y el símbolo. Al decidir un color para una empresa o un producto determinado es importante escoger el más representativo de la categoría del producto.
De hecho, en el color está buena parte del secreto para recordar una marca.
“Los caracteres tipográficos son mágicos. No solo comunican información acerca de una palabra, sino que transmiten un mensaje subliminal”. Erik Spiekermann
La tipografía tiene el compromiso de ser uno de los elementos estratégicos de la construcción de una marca. Dota de carácter y estilo a la personalidad de marca de manera estratégica.
Para escoger la tipografía que mejor se adapta a tu marca es necesario tener presentes los objetivos y los valores que aboga tu marca. Es interesante que cuando se empiece con este punto tengamos un poco de visión en cuanto a tendencias. Esto nos ayudará a estar en sintonía con el contexto y el lugar.
El sentido común también es muy importante en este punto, ya que, por ejemplo, si nuestra marca quiere transmitir seriedad, será mejor usar fuentes “serif” (por ejemplo, Linotype, ITC Century y Caslon). En cambio, si queremos un toque moderno y fresco en nuestra marca, será mejor usar fuentes “sans serif” (por ejemplo, Helvetica, Avant Garde y Univers). Es verdad que esto no es una norma y muchas veces esto se da al revés, con lo cual generamos mucho más impacto en nuestra marca.
The New York Times es uno de los ejemplos más representativos cuando hablamos de tipografías:
Por suerte, el diseño digital tiene una gran cantidad de herramientas. Sin duda, las más destacadas son las del pack Adobe, pero existen algunas otras alternativas:
Entre los programas de edición, creatividad y diseño de la suite de Adobe existen, entre los más usados y conocidos…
Como alternativas a Adobe Photoshop o Illustrator tendríamos algunas opciones de pago, como Affinity Photo o Affinity Designer. En cuanto a las opciones de software libre, existen varios programas que permiten un manejo para todos los niveles. El hermano de Adobe Premiere Pro sería Filmora y el de Adobe Experience Design sería Invision.
También existen programas como Canva, que incluye un gran número de funciones, efectos y herramientas, las cuales permiten a los usuarios añadir y crear textos o imágenes, así como ajustar imágenes como mejor les parezca.
Tras este análisis en profundidad acerca de lo que es el branding digital y la importancia que tiene en tu imagen de marca, habrás visto que la mejor forma de seguir dando valor a tu marca es estar en permanente construcción, al día de las tendencias.
De este modo, es fundamental que una marca aporte valor y se distinga del resto, así como que cree un vínculo con las personas a las que se dirige. La coherencia y el sentido común durante la construcción de la marca serán tus mejores aliados.
¿Tienes alguna otra recomendación? ¿Quieres contarme tu experiencia o alguna lección imprescindible que aprendiste cuando tuviste que crear tu marca? ¡Compártela conmigo en la sección de comentarios!